¿En qué consiste la cláusula de confidencialidad en los contratos de trabajo?

Dentro de la relación laboral que tiene el trabajador y la empresa para la que presta sus servicios, el empleado tendrá conocimiento de cierta información sensible que se caracteriza por poseer un interés para el desarrollo empresarial, que en gran medida genera una diferenciación con el resto de empresas de su sector.

Esta información sensible se refiere, entre otras cosas, a documentos financieros, información personal sobre los clientes, precios de artículos adquiridos directamente al proveedor o distribuidor, y datos sobre personas físicas o jurídicas. 

Lo más recomendable para la empresa es oficializar un con el trabajador un contrato de confidencialidad por el cual éste se comprometa a no revelar cierta información delicada acerca de la empresa. Este escrito puede venir incluido en el contrato de trabajo o sino dentro de un anexo posterior a dicho contrato.

Incumplimiento de la cláusula por parte del trabajador 

Cuando firmas este tipo de cláusula el trabajador está obligado a evitar compartir con terceros la información con la que trabaja habitualmente. No puede compartir sus contraseñas ni utilizar los programas propios para desarrollar sus funciones laborales para otras tareas de su vida personal.

En caso de que el trabajador hiciera uso de los medios disponibles en la empresa para otros quehaceres que no tienen que ver con su trabajo, la empresa podría sancionarle con una multa ejemplar.

Diferencias en el momento del incumplimiento

Existen diferencias a la hora de hablar del incumplimiento de una cláusula laboral. Si la infracción se produce cuando la relación laboral empresa-trabajador continúa vigente, la compañía está en el derecho de sancionarle, si esta detecta el incumplimiento y lo demuestra. Si ocurre esto, se considera como una falta de tipo grave y podría acarrear el despido disciplinario, además de no percibir ningún tipo de indemnización en casos de gran calado.

En el caso de que la filtración de los datos de la empresa protegida por la cláusula de confidencialidad se produjese cuando el trabajador ha finalizado la relación laboral con la compañía, esta podrá imponer acciones legales contra el empleado. Este tipo de decisión empresarial se llevaría a cabo mediante la solicitud de una demanda por daños y perjuicios. 

¿Qué beneficio obtiene el trabajador? 

Es necesario apuntar que el derecho laboral determina que imponer esta cláusula de confidencialidad debe estar ligada a una compensación económica adecuada. Dicha compensación tiene que estar en el contrato laboral que firma el trabajador.

Más concretamente, debe incluirse junto a la redacción de la propia cláusula o bien en el desglose final del salario laboral que aparezca en la parte final del documento. La obligación de pagar al empleado con esta cantidad económica se ve como una especie de indemnización de la compañía para compensar el no poder trabajar en ciertas empresas.

Conclusiones finales

En resumen, la famosa y controvertida cláusula de confidencialidad, que seguro nos hemos encontrado alguna vez en nuestra vida profesional, es una medida por la que las empresas mantienen salvaguardados sus intereses con respecto a una utilización irregular de sus trabajadores en su beneficio a la hora de ser fichados por otras empresas, sobremanera cuando son aquellas que están en la competencia más próxima. 

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